El Samsung Galaxy S III ya ha sido anunciado, y la respuesta de LG no se ha hecho esperar, al menos sobre el papel. Y es que la batalla por la alta gama de terminales inteligentes es un no parar.
El nuevo “superteléfono” de LG se llamará Eclipse, y entre sus características más destacadas se encuentra el chip Qualcom Krait de cuatro núcleos a 1,5 GHz, 2 Gbytes de memoria RAM, GPU Adreno 320 y 16 GB de almacenamiento interno.
Respecto a la conectividad del terminal, LG Eclipse contará con soporte a redes de banda ancha móviles de cuarta generación LTE, Wi-Fi o Bluetooth. En cuanto a sistema operativo, Android 4.0 Ice Cream Sandwich será el elegido.
Queda claro, pues, como pasa en el terreno de las consolas, que la innovación deja paso a la potencia bruta, por la que parecen apostar todos los fabricantes en sus dispositivo de gama alta.