El nuevo parche que ha recibido Diablo III (1.0.3) impide que los jugadores que compren el juego online a través de su cuenta en Battle.net puedan jugarlo por completo durante las primeras 72 horas.
Esta medida supone que durante dicho periodo los compradores estarán limitados a jugar como si se tratara de una Starter Edition, sin juego globlal ni acceso en la casa de subastas, junto a un máximo de nivel 13 y la zona del Rey Esqueleto.
Todo lo dicho es una medida de garantía que, en teoría, ayuda a Blizzard a mejorar la seguridad alrededor del juego.