Los cambios iniciales, anunciados en octubre del año pasado, activaron las alarmas, cuando los desarrolladores de complementos para Chrome se dieron cuenta de lo que Google pretendía.
Este cambio de a poco llegaría a todos los navegadores que se basan en Chromium, o sea, Chrome, Opera, Vivaldi y hasta el próximo Microsoft Edge.
Ante la gran cantidad de críticas que se produjeron los días siguientes a darse a conocer esta noticia, ahora Google ha dado marcha atrás con todo esto. Google quería lanzar una nueva API, con nombre DeclarativeNetRequest, una versión mas chica de la API WebRequest, la cual no permite que los bloqueadores de anuncios funcionen.
Ahora, con todo esto, la API de DeclarativeNetRequest llegará soportando las reglas dinámicas, que son aquellas usadas por los bloqueadores de publicidad.
Según Google, la intención de querer realizar esos cambios no era “evitar el bloqueo de contenidos”, sino que “los usuarios puedan seguir personalizando el navegador Chrome para responder a sus necesidades”….
Fuente: TheRegister