El nuevo integrante de la conocida saga Dead Space de Visceral Games, fue probado con 35 tarjetas de video.
Para esta ronda de pruebas, usaron un equipo basado en el microprocesador Intel Core i7-3930K overclockeado a 4.8GHz y acompañado de 35 tarjetas de video basadas en variados GPUs de Nvidia y AMD de diversas generaciones gráficas (GeForce 400/500/600 Series y Radeon HD 5000/6000/7000 Series).
Dead Space 3, tal como lo adelantó la propia Visceral Games, no está muy optimizado para aprovechar los actuales microprocesadores multi-núcleo, y aunque en sus requisitos se mencione al menos un CPU doble núcleo, el juego apenas usa un único núcleo.