Si bien Microsoft lanzó la Xbox One X y Sony la PS4 Pro buscando estirar la vida de esta generación de consolas, aún se tienen las versiones básicas de las consolas con hardware de 2013, y para varios juegos ya se están quedando cortas, incluyendo el recién lanzado Control, donde tienen fuertes bajones de FPS.
Como vemos en el vídeo de Digital Foundry, en las consolas base Control es totalmente injugable. En escenas de acción la PS4 oscila entre 10 y 20 FPS, mientras que la Xbox One S oscila entre 15 y 20 FPS, que sigue siendo muy poco, y arruina totalmente la experiencia de juego.
Respecto a los modelos mejorados, la Xbox One X no tiene muchas complicaciones para mantenerse en los 30 FPS a los que fue limitado el juego, mientras que a la PS4 Pro le cuesta un poco más, y en ciertas escenas baja hasta 15.
Será interesante ver si Remedy lanza una actualización para el juego donde veamos mejoras de rendimiento, y en las consolas de Sony una mayor estabilidad de FPS, ya que se ve una fluctuación mucho mayor que en Xbox.
¿Que opinan sobre el rendimiento de Control en PS4 y Xbox One?