Dan Houser, cofundador del estudio y una de las mentes detrás de Grand Theft Auto y Red Dead Redemption, volvió a hablar sobre un proyecto muy esperado que nunca vio la luz, Agent. En una nueva entrevista, Houser contó detalles inéditos sobre el desarrollo del juego y explicó por qué nunca logró salir al mercado.
Agent, el sueño imposible de Rockstar
Anunciado oficialmente en 2009 como exclusivo para PlayStation 3, Agent prometía ser un juego de espionaje de mundo abierto ambientado en la Guerra Fría de los años 70. Durante años, su desarrollo se mantuvo en silencio hasta que finalmente fue abandonado sin explicación oficial.
Houser, que dejó Rockstar en 2020 para fundar Absurd Ventures, admitió que el proyecto simplemente no terminaba de encajar. “Trabajamos en varias versiones de un juego de espionaje de mundo abierto y nunca funcionó bien. Agent tuvo unas cinco versiones diferentes”, explicó. “Llegué a la conclusión de que no funcionaba”.
El creativo también reconoció que el problema no fue la falta de personal, sino que el concepto en sí era difícil de adaptar al formato de videojuego. “A veces pienso en ello, me quedo en la cama dándole vueltas, y creo que lo que hace que las historias de espías funcionen en el cine es exactamente lo que no funciona en un juego.”
Cinco intentos y muchas ideas descartadas
En la entrevista, Houser comentó que Rockstar experimentó con distintas ambientaciones y estilos antes de abandonar el proyecto. “Esa era una de las versiones”, dijo sobre la trama de la Guerra Fría. “Pero también tuvimos otra ambientada en la actualidad… trabajamos en él con tantos equipos diferentes”.
El resultado fue un desarrollo que nunca encontró su identidad. Aunque Agent apuntaba a ser un título ambicioso, la mezcla de espionaje, mundo abierto y acción terminó chocando con las limitaciones técnicas y narrativas del momento.
¿Es posible un buen juego de espías de mundo abierto?
Houser también se mostró dudoso sobre la posibilidad de lograr un equilibrio entre la narrativa de espionaje y la libertad del sandbox. Según él, el género requiere un control narrativo más cerrado, mientras que los juegos de mundo abierto priorizan la exploración y la improvisación del jugador.
La reflexión deja claro que Agent fue uno de los proyectos más complejos en la historia de Rockstar, un experimento ambicioso que nunca logró despegar. A pesar de eso, Houser no descarta que algún día alguien logre crear un juego de espías que funcione, aunque él mismo reconoce que todavía no encontró la fórmula.







