Científicos de Singapur han sabido encontrar un nuevo uso al grafeno, y tal y como apuntan, podría tratarse del elemento que cambiará por completo el mundo de la fotografía. Directamente de los laboratorios de la Universidad Tecnológica de Nanyang llega un sensor de imagen fabricado completamente de grafeno y cuyas sensibilidades son 1.000 veces superiores a las de los tradicionales sensores CMOS o CCD, además de que consume 10 veces menos.
La idea es utilizar estos sensores en equipos de vigilancia y satélites antes de llegar a las cámaras de fotos, un cambio que supuestamente no sería doloroso para nuestra cartera, ya que estos captores serían 5 veces más baratos.