La Organización Mundial de la Salud determinó hace unas semanas que el glifosato, el herbicida más usado en el mundo, el cual es cancerígeno y tiene una enorme polémica a nivel mundial es utilizado en las plantaciones de MATE.
Este herbicida que se usa en la producción de yerba mate, puede causar cáncer. Además señaló que precisamente la ingesta caliente de la infusión es lo que representa más peligro. Estudios anteriores demuestran esta conclusión.
El mate es una infusión que toman millones de personas, especialmente en América del Sur.
Argentina es el mayor productor mundial de yerba, la planta que se usa para hacer el mate.
Es la bebida más popular y se la considera tan emblemática que en 2013 fue declarada infusión nacional por ley.
Una investigacion no aclaro qué el mate es potencialmente dañino y recién fue descubierta.
La investigaciones simplemente enumera los riesgo de cáncer para quienes consumen la bebida en su forma más tradicional, caliente.
“Tres estudios de control en América del Sur investigaron la asociación entre tomar mate y el cáncer de esófago”, señala el trabajo.
Uno de los estudios, realizados en Uruguay, mostró que “quienes beben mucho mate tenían cerca de diez veces más posibilidades de desarrollar cáncer que personas que no toman mate”, detalla.
“En reglas generales, las investigaciones sobre el consumo de mate y el cáncer del tracto gastrointestinal superior sugieren una fuerte asociación”, concluye la IARC.
Aunque agrega que “no se vieron evidencias de esta asociación en un estudio que se hizo sobre el cáncer de vejiga”.
El organismo aclaró que no podía distinguir si los hallazgos se debían “al contenido de la bebida o a la temperatura a la que es consumida”.
Su conclusión fue poner al “mate caliente” en la categoría 2A –la más seria después de “cancerígeno” – y poner a la planta misma en el grupo 3.
Ahí se enumera a los productos “no clasificables según su carcinogenicidad en humanos”.