El principal desarrollador detrás de BioShock Infinite, Ken Levine, , dice que él imagina el próximo juego como una experiencia completamente desarrollada que tendrá un final claro y no admitirá contenido descargable después del lanzamiento.
«Definitivamente hay un final claro para la narrativa de este juego. Del contenido que hemos mostrado no hay nada que podamos incluir en un paquete y enviarlo a los jugadores. En primer lugar, es cortado por una razón: no nos pareció adecuado, y en segundo lugar, se encuentra en un estado que es completamente ‘rot’, como lo llamamos en la industria de videojuegos», dijo Levine a AusGamers.
El jefe de Irrational Games cree que todos los elementos de juego deben evolucionar al mismo tiempo, porque de lo contrario el equipo corre el riesgo de tener una experiencia desarticulada que dejará insatisfechos a los jugadores.
BioShock Infinite será lanzado a finales de marzo de 2013.