La serie de unidades centrales de procesamiento Xeon E3 de Intel necesita placas madre al igual que todas las otras CPUs, así que ASUS decidió que era la hora de que sus laboratorios crearan otra plataforma.
La placa madre que estamos examinando aquí se llama P8C WS, utiliza el socket LGA 1155 y el nuevo chipset C216.
WS en el nombre significa “workstation” (estación de trabajo), dejando claro que éste es un elemento que no debería suscitar el interés de los consumidores normales.
Por supuesto, además de las CPUs Xeon E3, los procesadores Core i3 de 32nm y 22nm son compatibles con la placa base, tanto de la segunda como de la tercera generación.
Hay dos ranuras PCI Express Gen 3.0 x16 (modo de x8 dual), para tarjetas gráficas, junto con dos ranuras PCI Express 2.0 x16, una ranura PCI Express 2.0 x1 y una ranura PCI normal.
Además, el espacio de almacenamiento puede agregarse a un ordenador de sobremesa a través de HDDs o SSDs con soporta para la interfaz SATA II (cuatro puertos, azul) y SATA III 6.0 Gbps (dos puertos, gris). ASUS podría haber elevado el número mediante la implementación de algunos controladores SATA de terceros, pero decidió no hacerlo.
Sin embargo, todos los demás puertos y encabezados de pin están presentes. Sin contar el panel trasero de E/S, es posible establecer una conexión USB 3.0, tres enlaces USB 2.0 (dos puertos internos, un conjunto de cabezales) y una conexión FireWire. También existen pines serie / paralelos y un módulo TPM.
Y ahora llegamos finalmente a la cuestión de la conectividad y las opciones de E/S utilizables vía la parte trasera de la placa base.
Dos controladores LAN Gigabit habilitan la compatibilidad con Ethernet dual. ASUS también eligió incluir FireWire, seis puertos USB 2.0, dos USB 3.0, audio de 7.1 canales (con salida S/PDIF coaxial y óptica), un puerto PS/2 y una salida DVI de doble enlace (Displayport no está disponible por alguna razón). Las configuraciones de triple pantalla no están posibles en este caso.