Mucha gente siente que su privacidad es invadida al colocar un asistente virtual en su casa, y luego de casos como este, no podemos asegurar lo contrario. Alexa grabó (sin permiso) una conversación de una pareja de Portland, Oregon, Estados Unidos, y la envió a un empleado que estaba en la lista de contactos.
El empleado recibió los audios e inmediatamente alertó a la pareja. El mencionó que hablaban de pisos de madera, y efectivamente momentos antes la pareja había estado hablando de esto.
Amazon envió técnicos al domicilio, quienes revisaron los registros, donde figura que se había detectado Alexa, y el comando “enviar mensaje a”, y por eso se envió, pero la pareja asegura que esto no pasó.
De ahora en mas, en su casa han desconectado todos sus dispositivos Echo. Tenían uno por habitación, y los utilizaban para el control de dispositivos en el domicilio. Amazon ofreció limitar las funcionalidades de los asistentes solo para el control de dispositivos, aunque la familia se negó.
¿Que opinan sobre los asistentes virtuales?
Fuente: PhoneArena