El telescopio espacial Hubble cumple 25 años, nacía un 24 de abril de 1990, diseñado en conjunto por la NASA y la ESA, ese día era lanzado a bordo del transbordador espacial Discovery en un proyecto que partía con especial ilusión ya que llevaba en las mentes de la comunidad científica desde finales de la década de los 70. Comenzó en una órbita libre a unos 600 kilómetros de la superficie terrestre. Han pasado 25 años y, sin duda alguna, este telescopio se ha convertido en una de las misiones astronómicas más prolíficas e importantes de la historia de la humanidad.
Edwin Hubble, el primer astrónomo que demostró que había otras galaxias aparte de la nuestra, la Vía Láctea, y que, por ejemplo, el Universo estaba en expansión, por este señor se llama Hubble el telescopio.
El telescopio viaja a unos 27.000 kilómetros por hora, por lo que tarda en dar una vuelta completa a la Tierra unos 95 minutos. Mide 13,3 metros de largo, tiene un diámetro superior a los 4 metros y pesa algo más de 10 kilogramos.
Se ha convertido en el fotógrafo que mejores panorámicas del universo más profundo y lejano nos ha remitido gracias a su sensibilidad a la luz y su velocidad de transmisión de datos: cada semana remite a los expertos unos 140 gigabytes de información.
A pesar de que en 2005 se agotaron sus baterías y tuvo que estar en hibernación durante casi cuatro años, tras este sueño obligado debido a la obsolescencia de sus componentes y al desgaste natural de sus instrumentos que debían ser reparados y actualizados, en 2009 volvió a la vida.
¿Hasta cuándo permanecerá activo el telescopio Hubble? La NASA y la ESA han calculado que tras la reparación de 2009 el observatorio seguirá activo entre 2019 y 2030.