La empresa Semiconductor Manufacturing International Corporation, mejor conocida como SMIC, fue listada esta semana en el Departamento de Comercio de los Estados Unidos. En otras palabras, esto significa que las empresas del país norteamericano tienen prohibido hacer negocios con el gigante chino de fabricación de semiconductores.
En la práctica, SMIC ahora tendrá dificultades para importar y exportar productos de EE.UU. Aunque quizás lo peor de todo sea la importación, ya que no podrá comprar las tecnologías imprescindibles para la fabricación de sus futuros procesadores, sobre todo en procesos más nuevos, como los 5nm que ya están apareciendo en Samsung y TSMC.
La mayoría del público comenzó a notar la guerra comercial entre Estados Unidos y China cuando el gobierno de Donald Trump incluyó a Huawei en su lista de entidades prohibidas. Pero a diferencia del fabricante de teléfonos, EE.UU. no acusa a SMIC de espionaje ni de invasión de la privacidad, sino de proveer a las fuerzas militares chinas de tecnología:
«No permitiremos que la tecnología estadounidense avanzada ayude a construir las fuerzas militares de un adversario cada vez más beligerante. Entre las preocupantes relaciones de SMIC con el complejo industrial militar, la empresa ilustra perfectamente los riesgos de que China aproveche la tecnología estadounidense para respaldar su modernización militar».
Esta prohibición sigue siendo el resultado de políticas públicas cada vez más restrictivas del gobierno de Trump contra las empresas chinas. Su administración ya había levantado sospechas contra SMIC y su conexión con las fuerzas militares. Ahora, afirman que sus preocupaciones se confirmaron, por lo que decidieron poner a la compañía en la lista, que ya se encuentra compuesta por otras 60.
El país de la libertad sigue restringiendo las relaciones comerciales con empresas chinas, ahora con SMIC ¿Quién sigue?
Fuente: Engadget