Ya veníamos hablando de las ventas de Toshiba, y en enero estaba vendiendo el 20 por ciento de su negocio de memoria NAND Flash a Western Digital. Con esto pensaban resolver sus problemas financieros. La cosa es que solo pasaron 20 días y ya esta el rumor de que Toshiba podría volver a vender un porcentajes del negocio de NAND, ahora se habla de un 60%, lo que significa quedarse con una producción NAND en minoría con una parte del 20% del negocio.
Todo este problema viene de la mano de los errores de contabilidad con unos inexistentes 1.706 millones en ganancias, lo que creó dificultades adicionales como su caída en la bolsa de Tokio seguida por una multa de 60 millones de euros.
El problema es que para el empresa la producción de flash NAND es estratégicamente importante porque permite a la empresa producir todo tipo de dispositivos de almacenamiento, lo que le permite mantener la verticalidad total de la producción, desde el desarrollo del producto hasta el diseño y fabricación, lo que lleva a mayores márgenes de beneficio por cada producto vendido.
Toshiba se enfrenta a tiempos difíciles.